El caballero de la triste figura
Los encapuchados respondieron que iban de prisa y no le hicieron caso a don Quijote, quién de nuevo les advirtió que si no paraban todos se medirían con él en batalla. Y se lanzó con Rocinante enfurecido, tanto que una mula del susto lanzó a su jinete al suelo. Y don Quijote siguió atacando como si de verdad estuviera combatiendo, los hombres desarmados y asustados corrieron por el campo, veían a don Quijote como el mismo diablo que venía a llevarse el cuerpo que tenían en el ataúd. Finalmente uno de ellos respondió que el cuerpo era de un caballero fallecido por deseo de Dios.
Sancho observando todo sólo dijo:
-”Sin duda mi amo es tan valiente como él dice”.
Y en ese momento al verlo iluminado por la tenue luz que había, Sancho comenzó a llamarle ‘El caballero de la triste figura’
From: $125.00 / mes durante 12 meses
Los encapuchados respondieron que iban de prisa y no le hicieron caso a don Quijote, quién de nuevo les advirtió que si no paraban todos se medirían con él en batalla. Y se lanzó con Rocinante enfurecido, tanto que una mula del susto lanzó a su jinete al suelo. Y don Quijote siguió atacando como si de verdad estuviera combatiendo, los hombres desarmados y asustados corrieron por el campo, veían a don Quijote como el mismo diablo que venía a llevarse el cuerpo que tenían en el ataúd. Finalmente uno de ellos respondió que el cuerpo era de un caballero fallecido por deseo de Dios.
Sancho observando todo sólo dijo:
-”Sin duda mi amo es tan valiente como él dice”.
Y en ese momento al verlo iluminado por la tenue luz que había, Sancho comenzó a llamarle ‘El caballero de la triste figura’
Los encapuchados respondieron que iban de prisa y no le hicieron caso a don Quijote, quién de nuevo les advirtió que si no paraban todos se medirían con él en batalla. Y se lanzó con Rocinante enfurecido, tanto que una mula del susto lanzó a su jinete al suelo. Y don Quijote siguió atacando como si de verdad estuviera combatiendo, los hombres desarmados y asustados corrieron por el campo, veían a don Quijote como el mismo diablo que venía a llevarse el cuerpo que tenían en el ataúd. Finalmente uno de ellos respondió que el cuerpo era de un caballero fallecido por deseo de Dios.
Sancho observando todo sólo dijo:
-”Sin duda mi amo es tan valiente como él dice”.
Y en ese momento al verlo iluminado por la tenue luz que había, Sancho comenzó a llamarle ‘El caballero de la triste figura’
Los encapuchados respondieron que iban de prisa y no le hicieron caso a don Quijote, quién de nuevo les advirtió que si no paraban todos se medirían con él en batalla. Y se lanzó con Rocinante enfurecido, tanto que una mula del susto lanzó a su jinete al suelo. Y don Quijote siguió atacando como si de verdad estuviera combatiendo, los hombres desarmados y asustados corrieron por el campo, veían a don Quijote como el mismo diablo que venía a llevarse el cuerpo que tenían en el ataúd. Finalmente uno de ellos respondió que el cuerpo era de un caballero fallecido por deseo de Dios.
Sancho observando todo sólo dijo:
-”Sin duda mi amo es tan valiente como él dice”.
Y en ese momento al verlo iluminado por la tenue luz que había, Sancho comenzó a llamarle ‘El caballero de la triste figura’
Reviews
There are no reviews yet.