Dulcinea
Listas las armas, puesto nombre a su caballo y confirmándose a sí mismo, ahora necesitaba una dama de quien enamorarse, porque el caballero andante sin amores es como árbol sin hojas y sin fruto, y cuerpo sin alma.
Recordó a una labradora de muy buen parecer que vivía cerca a él y de quién estuvo enamorado por un tiempo, aunque ella nunca lo supo, y así, inspirado en Aldonza Lorenzo, creó a su amada Dulcinea del Toboso.
Desde: $125.00 cada mes por 12 meses
Listas las armas, puesto nombre a su caballo y confirmándose a sí mismo, ahora necesitaba una dama de quien enamorarse, porque el caballero andante sin amores es como árbol sin hojas y sin fruto, y cuerpo sin alma.
Recordó a una labradora de muy buen parecer que vivía cerca a él y de quién estuvo enamorado por un tiempo, aunque ella nunca lo supo, y así, inspirado en Aldonza Lorenzo, creó a su amada Dulcinea del Toboso.
Listas las armas, puesto nombre a su caballo y confirmándose a sí mismo, ahora necesitaba una dama de quien enamorarse, porque el caballero andante sin amores es como árbol sin hojas y sin fruto, y cuerpo sin alma.
Recordó a una labradora de muy buen parecer que vivía cerca a él y de quién estuvo enamorado por un tiempo, aunque ella nunca lo supo, y así, inspirado en Aldonza Lorenzo, creó a su amada Dulcinea del Toboso.
Listas las armas, puesto nombre a su caballo y confirmándose a sí mismo, ahora necesitaba una dama de quien enamorarse, porque el caballero andante sin amores es como árbol sin hojas y sin fruto, y cuerpo sin alma.
Recordó a una labradora de muy buen parecer que vivía cerca a él y de quién estuvo enamorado por un tiempo, aunque ella nunca lo supo, y así, inspirado en Aldonza Lorenzo, creó a su amada Dulcinea del Toboso.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.